Capitulo 30: La decisión definitiva...

Narrado por Ashley:

Sonó el despertador, aunque en realidad no me hizo falta, ya que no había conseguido pegar ojo en todo la noche... y hoy era el día en que tenía que tomar una decisión que hace unas horas ni siquiera pensaba que tomaría... Hasta hace poco pensaba que Christian era el único para mí pero reconozco que la vuelta de Fred no había sido un simple acontecimiento más en mi vida... Los dos me importaban mucho, pero estaba segura de que solo estaba enamorada de uno de ellos, la pregunta era cuál. Hoy lo descubriría... sin importar lo que tuviera que pasar para averiguarlo.
Hice mi rutina habitual de las mañanas, como si nada importara, como si fuera a ser otro día normal en mi vida, cuando todo podía cambiar en un solo instante solo conque yo lo decidiera. No tardaría mucho en averiguarlo...
El autobús estaba a punto de llegar, yo comencé a correr... No sería un día como otro cualquiera, hasta la naturaleza lo notaba, lo mostraba en el ambiente... Y yo cogí mi autobús, sabiendo hacia donde me dirigía, pero no como vendría a la vuelta...
Llegué por fin al instituto, y las tres primeras horas se me hicieron eternas, y estaba demasiado nerviosa como para concentrarme en algo, cuando...
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Narrado por Christian:
Por fin había tocado la campana del recreo. Era ahora o nunca, y esta vez no podía echarme atrás. Bajé abajo, y fui a buscarla al quiosco al que siempre iba a comprar. Tuve mucha suerte, porque la encontré, y la cogí del brazo. No podía esperar más...

Ashley: ¿Qué haces?
Christian: Lo que tenía que haber echo antes, pero no me atrevía, ahora sé que debo hacerlo, debo jugármelo todo en este momento...

Sin dudarlo ni un instante, la agarré por la cintura y la besé, con pasión, con dulzura, con todos esos sentimientos que llevaba contenidos desde hacía un tiempo que para mí había sido muy largo... Y disfruté, disfruté de aquel beso robado como de ninguno de los otros, porque sabía que podía ser el último...
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Narrado por Ashley:
Christian... a pesar de todo lo mal que le hice pasar, a pesar de que me amaba y lo dejé escapar... Sus sentimientos no habían cambiado para nada... Lo cierto es que sentí muchas cosas con aquel beso... Demasiadas... Muy fuertes... Quizá incluso más que antes... ¿Entonces estaba enamorada de él? Eso parecía... Me sentí muy feliz cuando lo pensé.
Otras tres horas más de clase, y por fin pude volver a casa. Esperé impaciente a que el reloj marcara las cuatro... Parecía que los minutos eran horas, se me hacía la espera eterna... pero, por fin, eran las cuatro, y timbraron a la puerta de mi casa. Sabía quién estaba al otro lado, sabía a por lo que venía...

Ashley: Hola Fred, pasa
Fred: Hola Ashley- lo notaba un poco cortado- Bueno, y bien, ¿de que querías hablar?
Ashley: Ven, vamos al salón y te lo explico.

Nos tiramos como una hora hasta que por fin terminé de explicarle todo, pero lo entendió.

Fred: Entonces... ¿has decidido ya o no?
Ashley: Pues la verdad es que...

En ese mismo momento sonó mi móvil, reconocí la melodía... sabía quién me estaba llamando y también sabia que debía cogérselo...

Capitulo 29: Recuerdos del pasado...

Narrado por Christian:

Estaba desesperado, nervioso, agitado, temeroso... Mañana podía cambiar mi vida completamente, y solo una persona tenía el poder para ello: Ashley. Mañana podía convertirme en el hombre más feliz del mundo, pero también podía mandarme al infierno, aunque sabía perfectamente que para ella tenía que ser algo confuso, y tampoco iba a estar tranquila... la conocía perfectamente. Y eso que solo hacía unos meses que la conocía pero parecía como si la conociese de siempre. Aún me acuerdo como la conocí, hace unos meses...

                                                           

                                                                                                                                ***FLASHBACK***

Habían terminado las clases, y por fin tenía vacaciones de verano. Adoraba Sidney, aunque estas vacaciones me iba a ver a mis tíos a España. Ya había ido algunos años, y más o menos me defendía con el español entre lo que estudiaba en el colegio y lo que aprendía allí. Lo que no sabía es que ese viaje iba a ser muy especial...
A la mañana siguiente, preparé mi maleta, y por la tarde me dispuse a coger el avión, me esperaba un día entero de viaje, pero merecía la pena... España me encantaba, y pasaría un verano inolvidable allí... aunque aún no sabía cuanto. Cuando por fin después de 24 horas de viaje aterricé, lo primero que hice fue dormir. Me pasé 12 horas durmiendo, pero después de que recuperé el sueño, me dirigí a la playa. Lo primero que hice fue correr al agua, pero... algo me detuvo en seco. La vi de lejos, y me quedé totalmente embobado. Nunca me había pasado nada parecido, pero aquella chica era distinta... tenía algo especial que no sabía explicar. Parece que ella también se había fijado en mi, lo noté en su mirada...
Volví a casa con el recuerdo de aquella chica en la cabeza, pensando que no la vería nunca más, pero la suerte, el destino o las casualidades de la vida quisieron que su familia fuera la vecina de mis tíos. No puede ser, me dije en ese momento, pero por otra parte, me alegraba de poder volver a verla. Esa noche comenzó todo. A partir de esa noche, empezamos a hablar y a llevarnos muy bien, pero los dos sabíamos que había algo más... Y una noche de mediados de Agosto, empezamos por fin a salir
Christian: Ashley, verás, yo... no estoy acostumbrado a hacer estas cosas, porque nunca e había pasado esto, pero... desde que te vi por primera vez en la playa, me encantaste. Aunque encantar es poco, para lo que sentí.... En este tempo he podido ir conociéndote mejor, y me he enamorado de ti completamente... Creo que no me queda nada más que decir excepto... ¿quieres salir conmigo?
En aquel momento, Ashley estaba emocionadísima, se le notaba en sus ojos, en sus mejillas rojas, en su sonrisa tímida... y en aquel momento no me pudo encantar más. Pasamos un verano inolvidable, como pensaba, aunque no de esa manera... tuvimos nuestro primer beso esa misma noche, fuimos al cine y compartimos las palomitas, nos quedábamos en casa de la familia de uno de los 2 y cuando no había nadie disfrutábamos bailando... Estábamos enamorados y se notaba. Por desgracia, legó el día que ambos nos temíamos: el día que yo tenía que volver a Australia. Los dos estábamos fatal, pero no podíamos hacer otra cosa... ella volvería a su vida normal, con su "novio" al que no quería, y yo a mi escuela con mis amigos y mi rutina... Decidí que pronto volvería por ella, no iba a dejarla ir, después de lo que me había costado encontrar a alguien como ella...
                                                                                                                                                      ****

Parece mentira que haga tan poco tiempo que pasó desde esos momentos mágicos, y menos desde que lo habíamos dejado y estábamos los dos tan mal... Mañana sabría por fin su respuesta y tal vez, podríamos volver a aquellos tiempos no tan lejanos en los que los dos éramos felices y cada instante que compartíamos era único y especial... pero que eso pasara solo dependía de ella, y de sus sentimientos... que tal vez no fueran tan fuertes como yo pensaba, pero esperaba que sí, porque no quería perderla para siempre... Era mi vida entera, mi mundo mi universo, no podía estar sin ella más tiempo... y ahora podía estar a punto de perderla por otro... Pues mañana jugaría mi última carta antes de que hablara con Fred, no iba a perder sin luchar por última vez...

Capitulo 28: Y más...

Narrado por Courtney:
Hacía unos días que ya no me llamaba ni me mandaba mensajes... Normal, se habría cansado de que nunca le contestara ni le respondiera. Lo curioso es que ahora echaba de menos que lo hiciera, es como el viejo refrán de que nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes... Yo ahora lo estaba experimentando. Lo malo no era eso... sino que aunque consiguiera que me volviera a hacer caso, no era yo la que en realidad le interesaba. Porque sí, ese chico no estaba enamorado de mi, sino de otra chica. Porque ese chico estaba loco por ella desde hacía muchos años. Porque ese chico estaba enamorado de la chica del cumpleaños. Porque ese chico era su mejor amigo: Edwin. Y contra Ashley, yo no tenía nada que hacer...
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Narrado por Andrew:
Sabía que Jennette me había visto cuando fui al parque con ella. Es curioso, porque desde el día de la fiesta, no hacía otra cosa que pensar en ella, en el beso que nos dimos, cuando realmente nunca me había interesado, porque hacia un tiempo que me gustaba Jenny, pero... parecía que no era tan fuerte lo que sentía por ella, de echo, ya hacía mucho que no pensaba en ella, solo pensaba en Jennette, no me la sacaba de la cabeza, y eso que siempre me había parecido una chica insoportable, de echo casi podía decir que la odiaba. ¿Entonces? Quizá sea por lo que dicen de que el amor y el odio son dos caras de la misma moneda... Y yo hasta la fiesta no me había dado cuenta. ¿Estaba enamorado de ella? Eso parecía. Y lo peor es que seguro que se pensaba que la chica que había visto conmigo era mi novia, cuando en realidad era mi prima. ¿Debería decirle lo que siento? Definitivamente sí, mañana cuando saliéramos del instituto se llevaría una sorpresa... Y esperaba que reaccionara bien.
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Narrado por Ashley:
Al final hice lo que debía. Me armé de valor y llamé a Fred, y quedamos en que vendría a mi casa a las cuatro. Tal vez porque de verdad sentía algo por él, o tal vez por rememorar viejos tiempos, el caso es que estaba mirando nuestro álbum de fotos, el álbum que aun conservaba con cierto cariño. Tenía muy buenos recuerdos de aquella época: nos lo pasábamos muy bien juntos, nos reíamos mucho, y lo más importante, nos queríamos. Fred realmente había sido mi primer amor,y supongo que como es normal, siempre lo llevaría en mi corazón... Lo malo era saber si aún sentía algo por él, porque eso desde hacía unas horas me estaba rondando por la cabeza. Era algo que ni se me había ocurrido pensar, pero... no era tan descabellado, la verdad. Después de todo, él no me había olvidado a pesar de todo el tiempo que pasamos separados hasta que nos reencontramos, ¿por qué no me podía pasar a mi lo mismo? Y lo peor... ¿cómo se lo diria a Christian, si resultaba ser verdad? ël me importaba demasiado, y no quería hacerle daño... A lo mejor sentía algo por los dos... Intenté dormir, pero como tantas otras noches, no lo conseguí. Estaba nerviosa por lo que quizá iba a descubrir, porque mi cabeza no paraba de pensar en el tema y no conseguía callarse ni un segundo, a pesar de que intenté acallarla escuchando música, pero fue peor, porque cada vez que sonaba una canción romántica, Fred y Christian volvían a mi cabeza con más intensidad. No conseguía relajarme ni concentrarme, y a pesar del agotamiento físico y mental que tenía encima, no caí rendida a Morfeo aquella noche. Mis padres me echaron la bronca y me dijeron que me fuera a dormir de una vez, no entendían que por desgracia y por mucho que quisiera no podía hacerlo, era algo superior a mi... De todos modos apagué la luz de mi cuarto y me puse a escuchar música. Empezó a sonar esta canción, y no pude por más que llorar...

Capitulo 26: La cena, parte 2

Justo cuando íbamos a empezar a hablar, llegó el camarero. Ya que había venido y teníamos hambre, decidimos pedir. Quizá fuera mejor hablar cuando hubiéramos acabado de cenar, así estaríamos más tranquilos. Christian pidió una ensalada de pasta y merluza a la plancha, y yo me decidí por unos espaguetis a la carbonara y unos calamares fritos. De postre ambos pedimos tarta de queso. He de decir que disfrutamos mucho con la comida, se notaba que era un restaurante de calidad. Y por fin, después de tanto tiempo esperando, pudimos hablar:

Christian: Bueno, creo que soy yo el que debe empezar a hablar - yo estaba a punto de hacerlo, pero él se me adelantó-. Verás, sé que no he llevado de la mejor manera lo que pasó el día que me dejaste porque las cosas que intentabas hacer para mí nunca salían bien. Pero también sé que si me he comportado de esa manera ha sido porque no quería perderte, y menos por algo así, a lo que yo no daba importancia. Si me hubieras dicho que era porque ya no me querías o porque te habías enamorado de otro, o algo similar, me hubiera sentado fatal, pero lo habría entendido. No obstante, yo sé que me querías aquél día y aún sigues queriéndome, lo veo en tus ojos, por eso me enfadé tanto, pero ahora estoy aquí y te pido que me des una oportunidad, siempre y cuando tu creas que estás preparada para dármela, no te voy a obligar. Así que solo me queda saber tu respuesta, ¿qué me dices?

Ashley: Me gustaría que todo fuese como antes, porque sí, te sigo amando como lo llevo haciendo desde que te conozco, y creo que eso es algo que nunca va a cambiar. También sé que fue una estupidez la razón que te di para dejarlo, y no pasa ni un solo día que no me arrepienta de haberlo dicho. Pero he pensado mucho en eso, y he llegado a una conclusión. Necesitaba tiempo para mí, para pensar, para razonar, necesitaba algo de espacio. Sé que nunca fuiste el típico novio que no se despega ni un solo minuto, ni mucho menos, siempre me distes la libertad que necesitaba. Quizá es que  no me veía preparada para una relación, porque pienso que nunca hago las cosas bien en ese aspecto, y por eso siempre me sale todo mal en mis relaciones. Eso fue lo que pensé, y cuando volví a ver a Fred me di cuenta que estaba en lo cierto. Aún arrastro la sombra de nuestra relación, todo se acabó por mi culpa y hasta que no consiga arreglarlo, no estaré preparada para salir con nadie.

Christian escuchó todo mi discurso atentamente, sin perderse ni un solo detalle de lo que le estaba contando. Cuando acabé de soltar todo lo que llevaba dentro, contestó:

Christian: Verás Ashley, creo que yo también he llegado a una conclusión después de escuchar todo lo que me has dicho. Creo que aunque estás enamorada de mí, nunca has podido olvidarte de Fred, y aún sigues sintiendo algo por él, quizá no sea mucho, pero si lo suficiente como para que no estés tranquila con otro chico. Deberías hablar con él y ver hasta donde llegan tus sentimientos por él. Una vez lo hagas, sea cuál sea el resultado, podrás cerrar la herida que aún tienes por aquella relación fallida, según tu punto de vista, por tu culpa. Yo te estaré esperando, no lo olvides, y si decides que quieres estar con él... lo aceptaré, no me quedará otra.

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Narrado por Christian:

Me había costado un mundo decirle todo aquello, pero es lo que debía hacer. Le cogí suavemente de la mano en símbolo de despedida y me marché de aquél restaurante. Aparentaba tranquilidad delante suya, pero lo cierto es que estaba destruido. La amaba demasiado, y no aguantaba aquella situación. Cuando por fin llegué a casa, me fui directo al baño. Llené la bañera y me metí. Mis emociones por fin se desataron en aquél baño cerrado, en aquella casa en la que no había nadie. Nada detuvo mis sentimientos, pues hasta que me fui a dormir, mis emociones seguían mostrándose, y yo no podía hacer nada para pararlo.

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Narrado por Ashley:

Me quedé paralizada con lo que me había dicho Christian, y ahora, de camino a mi casa, no podía evitar pensar en si podría tener razón. Caminé y caminé sin encontrar una respuesta, y cuando me quise dar cuenta, ya estaba en mi habitación llorando. Lo peor no era que no solo no había conseguido solucionar nada, sino que ahora encima tenía nuevas dudas... Mañana tenía que ver a Fred. Sino lo hacía, nunca averiguaría lo que necesitaba, y cuanto antes lo hiciera, mejor sería. En cuanto me levantara lo llamaría...

Mi familia fue apareciendo por mi habitación para saber lo que me pasaba... y lo cierto es que o me apetecía contarles nada, por suerte lo entendieron...

Estuve toda la noche nerviosa, dando vueltas y sin poder dormir bien.

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Siento haber tardado tanto en subir un capitulo!! Pero es que no he parado con los exámenes y los trabajos... lo siento mucho de verdad. Hasta después del 16 no creo que pueda volver a subir un kapitulo... Espero que aguanteis XD Y trankilos que os resarciré ^^ en cuanto acabe con todo no pararé de escribir, y volveré a hacer un maratón, asi q no dejis de leer mi nove

Os kiero muxisimo mis lector@s

Capitulo 25: La cena

Me encontre con mi amigo Edwin, no podia pararme e intente que no me viera, pero... sin suerte. Nada más salir por la puerta, sabía que estaba allí. Y, como no, empezó a hablarme.
Edwin: Hola, Ashley -lo dijo en un tono serio, y yo sabía el motivo. Lo de la fiesta había sido un palo muy grande para él, y yo lo sabía, pero ¿como me iba yo a imaginar que me quería? Y ahora que lo sabía me daba vergüenza hablar con él, porque no sabía como hacerlo, a pesar de que era mi mejor amigo desde que éramos pequeños...
Ashley: Hola Edwin, escucha, yo... Lo siento mucho de verdad. Sé que desde la fiesta nuestra relación ha cambiado, pero quiero recuperar a mi mejor amigo, ¿sabes? Porque lo quiero mucho, aunque no sea de la misma manera que él me quiere a mi. Lo necesito a mi lado, porque es una persona muy importante para mí.
Edwin: Ashley, sabes que me gustaría, pero... Necesito tiempo para hacerlo, aún estoy dolido, aunque no te echo la culpa, eso desde luego. Y cuando esté mejor, entonces volveremos a ser amigos, todo volverá a su cauce, te lo prometo.
Lo cierto es que esto me dejó mucho más tranquila, pero... miré el reloj. Oh, oh, ya eran casi as nueve y me quedaban unos quince minutos para llegar donde habíamos quedado, me matarían.
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Narrado por Christian:
Llegamos al centro comercial a las ocho y media y, efectivamente, allí estaba Jenny, pero seguía sin fiarme de ellas. De todos modos, las seguí, haber donde me llevaban...
Jenny: Por aquí creo que había una tienda, ¿nos ayudas a mirar? Que ya va siendo hora de que encontremos algo adecuado para él...
Christian: Está bien, entremos entonces, espero servir de ayuda -sonreí, aunque no fuera lo que más me apetecía hacer
Meaghan: Seguro que sí, venga.
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Narrado por Ashley:
Ya llegaba cinco minutos tarde... Y aunque estaba lejos de donde habíamos quedado, me encontré con Jess.
Ashley: ¿Jess? ¿Qué haces aquí?
Jess: Venir a buscarte, las demás pensaban que llegarías tarde, y veo que estaban en lo cierto. Vayámonos, anda, ¿no querrás que se mosqueen, verdad? Espera un momento que las llamo.
Mi prima cogió su móvil, y se dispuso a llamarlas, me iba a caer una bronca...
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Narrado por Jess:
Al parecer, Christian ya estaba en el centro comercial y ya habían terminado de comprar el "regalo para el primo de Jenny", así que solo quedaba que disimuladamente consiguieran llevarlo al restaurante que habíamos elegido, que estaba bastante cerca de donde se encontraban y ya estaba todo solucionado. Ahora era mi turno.
Jess: Acabo de hablar con Jenny, lo malo es que han echo un cambio de planes, y al final no van al Buda, sino a un sitio nuevo.
Ashley: ¿Y está muy lejos? Es que los tacones me están matando.
Jess: No te preocupes, tú ocúpate de seguirme, y ya está.
Ashley: Está bien...
Diez minutos después llegamos a nuestro destino.
Ashley: Jess, esto no es una discoteca, ¡esto es un restaurante!
Jess: Lo sé, aquí es donde tenemos que estar. Tú entra, créeme que no te arrepentirás.
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Narrado por Ashley:
Con miedo, abrí la puerta del restaurante. Me giré para ver si mi prima me podía explicar algo, pero ya no estaba, aunque dos segundos después, me llegó este mensaje:
Disfruta de la cena, y no te preocupes por nada. Y, por cierto, ya nos contarás como acaba, ¿eh? Te queremos mucho, y sentimos la jugarreta, pero sino no habrías venido. Vete a la mesa 4 y encontrarás una grata sorpresa.
Besos cariño.
Jenny, Meaghan y Jess.
Serían capullas... ¿y ahora que se supone que debía hacer? Al final me decidí por ir a la mesa, total ya que estaba allí...  Cuando llegué a la mesa, por fin lo entendí todo... ¡Las chicas me habían preparado una "cita a ciegas" con Christian! Las mataría el Lunes, aunque estaba agradecida. Teníamos que resolver nuestros problemas y visto que no habíamos podido ni hablar, ¿qué mejor oportunidad?
Ashley: Hola... Chrisitan, escucha, yo...
Christian:  No hace falta que digas nada. Siéntate y hablamos, ¿vale?
Hice lo que me mandó. Parecía que esta vez si íbamos a arreglarlo...

Capitulo 24: Comienza la trampa....

El viernes por la tarde llamé a Ashley para decirle si se venía con "nosotras de fiesta". Tardó un poco en contestarme porque estaba en el ordenador, pero finalmente después de un rato, me atendió:
Ashley: ¡Cariño, hola!
Jenny: Hola mi niña, te llamaba para ver si te venías hoy con las chicas a una fiesta, ¿que me dices?
Ashley: Pues lo cierto es que... no sé... tengo bastante que estudiar y muchos deberes por hacer...
Oh, oh, la cosa no empezaba bien, necesitábamos que viniera sí o sí, o nuestro plan fallaría. Tenía que convencerla de alguna manera.
Jenny: Venga... Tienes tiempo para estudiar hasta que te pasemos a buscar y el resto del fin de semana....
Ashley: Bueno... haber ¿sobre que hora me pasaríais a buscar?
Jenny: Pues sobre las nueve, ¿vienes?
Ashley: Está bien, iré, pero no me puedo quedar mucho ¿eh? Que tengo que madrugar
Jenny: Ok, no te preocupes, ah y por cierto, tráete ese conjunto nuevo que te compraste el otro día. En un rato te veo. Te quiero. ¡Besitos!
Ashley: De acuerdo guapísima. Nos vemos. ¡Ciao y besos!
Al fin había conseguido convencerla, menos mal. Ahora solo quedaba Christian y estaría todo arreglado,
esperaba que a Meaghan le estuviera saliendo bien.
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Narrado por Meaghan:
Lo había llamado como veinte veces y no me lo cogía, me estaba empezando a mosquear, pero como era por mi prima, pues tenía que hacer un sacrificio, así que decidí ir a donde solía ir con sus ammigos, y justo cuando salía de casa.... Me lo encontré, dándome de bruces contra él.
Christian: Ah, hola Meaghan, no me di cuenta que vivías aquí...
Meaghan: Pues desde luego ahora te debe haber quedado claro, ¿no? - dije, frotándome un poco el brazo que tenía dolorido por e golpe- ¿ Y tú que haces aquí?
Christian: Pues lo cierto es que ir a visitar a un amigo, por cierto, acabo de ver tus llamadas, ¿pasó algo?
Meaghan: En realidad nada importante, Jenny tiene un primo de unos quince años, y pronto es su cumpleaños, por no decir que este mismo domingo, y hoy es el último día que tiene para comprar porque mañana sale de viaje a Asturias, que es donde él vive, y nos preguntábamos si no era mucha molestia que nos acompañaras a escogérselo, porque no tenemos ni idea de que darle por su cumpleaños.
Christian: Bueno, está bien, os acompaño, espera que vaya a decirle a mi amigo que nos vemos mañana.
Meaghan: De acuerdo, aquí te espero.
Había tenido suerte. Jenny me había llamado hace un rato diciendo que Ashley ya iba, con lo que ya estaban los dos, ahora solo faltaba llevar nuestro engaño hasta el final, y procurar que sospecharan lo menos posible.
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Narrado por Christian:
Lo cierto es que no me había creído demasiado, por no decir nada, la excusa del primo de quince años, pero me intrigaba saber que planeaban, razón por la que había aceptado. Veríamos que pasaba esta noche, pintaba interesante... Lo cierto es que a mi me gustaban bastante las cosas que tenían un halo de misterio, pues pensaba que eran cosas que merecían la pena, eran interesantes y distintas a la rutina habitual.Después de contarle a mi amigo la situación, volví con Meaghan.
Christian: Ya podemos irnos.
Meaghan: Está bien, espera que llame a Jenny y Jess haber que me dicen.
Cogió el móvil y llamó, una vez que cortó, me contó un poco por encima la conversación.
Meaghan: Jenny nos espera en el centro comercial, pero Jess dice que no puede venir, nos encontraremos con ella después, que tiene que hacer unas cosas según ella importantísimas con una amiga, que luego traerá, así que vamos yéndonos ya.
Christian: Pues sí, vamos tirando.
Lo cierto es que ya intuía por donde iban los tiros, pero prefería esperar para confirmarlos...
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Narrado por Ashley
Lo cierto es que no tenía muchas ganas de salir, estaba cansada y quería descansar, pero que le iba a hacer... No entendía lo del conjunto, pero que le iba a hacer, tampoco tenía ganas de preguntar así que... Me lo puse, me maquillé un poco y me puse una diadema. Cogí mi móvil Samsung Galaxy Mini, mis llaves que tenían puesto mi llavero puesto, dinero y un bolso sencillito y pequeño para guardar las cosas.
Me disponía a salir de casa cuando...

Capitulo 23: ¿Posible reconciliación?

Me marché muy mal de su casa, no me esperaba lo que acababa de ver, y lo peor es que encima me había dicho que no quería exigencias y que me fuera, con lo cual ya veía casi imposible volver con ella, se quedaría con ese tal Fred que parecía que le importaba más que yo, y a mi me mandaría a tomar por saco cuando se le antojara. Sabía que me quería, pero quizá no tanto como pensaba...
En este momento tenía muchas dudas, y pensaba cosas que sabía que no eran ciertas, pero... Estaba sufriendo mucho por algo insignificante, pero que para mí era algo demasiado importante, algo que me creaba confusión y me hacía preguntarme cosas con respecto a ella que nunca debí cuestionar.
Cuando llegué a casa di un portazo sin importarme nada, necesitaba desahogarme y lo pagué con la puerta, un segundo después, empecé a llorar como no lo había echo nunca, en mi habitación sin que nadie me viera, no quería oír las típicas preguntas de:  hijo, por qué lloras? ¿Pero por qué habéis roto?... y un largo etcétera. ¿Cómo estaría ella?...
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Narrado por Ashley:
No sé por qué dije eso, quizá me agobié demasiado y solté lo primero que me vino. Pero si yo me quería reconciliar con él... A este paso, no volveríamos a estar juntos. Aparte, si sabía la respuesta, ¿por qué no se la dije? Lo eché de casa diciéndole que no me gustaba que me atosigaran, y que él lo había echo al pedirme una respuesta...
Cabezota, que no era más que una cabezota. No era capaz de disculparme ni de decirle que sí aunque quisiera porque era demasiado orgullosa para hacerlo, y si no cambiaba esa actitud lo perdería para siempre y eso es lo que menos deseaba que pasara en este momento... Pero no era capaz de decirle lo que sentía... Nunca fui capaz de hacerlo con nadie, no sé por qué... cuando lo pensaba me venían imágenes a la cabeza, pero eran tan difusas... Esa debía ser la razón de que no pudiera expresar mis sentimientos.
Llamé a mis primas para quedar, puesto que ya me encontraba mucho mejor y necesitaba despejarme un poco.
Fuimos de compras, y encontré un conjunto de un vestido y unos zapatos que me encantó, y no pude evitar comprarlo. Mis primas cuando vieron que lo cogía, se pusieron a cuchichear, ¿que estarían hablando?
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Narrado por Meaghan:
Lo cierto es que Jess acababa de tener una idea fantástica: Le diríamos a Ashley que nos acompañara a una fiesta vestida con lo que se había comprado, pero en realidad la llevaríamos a un restaurante para que estuviera a solas con Christian y arreglara las cosas, y de paso, también tendrían una cena romántica, era el plan perfecto.
Ashley vendría seguro, el problema era Christian... ¿qué hacíamos para llevarlo al restaurante? Quizá lo mejor era decirle lo que teníamos pensado, después de todo el quería arreglar las cosas con ella ¿no? Aunque si se lo decíamos y por cualquier motivo no quería venir, se fastidiaría todo porque sabría nuestro plan y no iría a la noche especial que les habíamos preparado, así que... ¿qué hacer?
Umm... Jenny solía tener buenas ideas, lo mejor sería que la llamáramos y pensar algo entre las tres.
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Narrado por Jenny:
Me acababa de enterar del plan y estaba entusiasmada pensando ya ideas con las chicas para que los dos fueran a la cita, porque con Ashley lo de la fiesta colaría, pero con Christian seguro que no...
Y creo que ya se me había ocurrido algo: Le diríamos que necesitábamos que nos acompañara a escoger el regalo para mi primo de quince años porque no teníamos ni idea de qué le podía gustar...
Ahora, solo había que pensar el lugar, el día y la hora. Para el lugar, lo mejor era mirar en la guía de restaurantes que tenía mi padre, o sino en Internet. Encontré uno perfecto, Alter Ego

Ya teníamos el lugar. Faltaba el día y la hora. Sino recordaba mal, dentro de poco hacía 4 meses que se conocían, así que ¿que mejor día? Y la hora, pues... las nueve y media era la hora ideal, ni muy pronto ni muy tarde.
Bien, al día siguiente le diríamos lo que habíamos planeado...

Capitulo 22: ¿De verdad?...

Narrado por Jess:
Desde el día de la fiesta no me encontraba muy bien, y todo por culpa de Jhon. Había visto perfectamente como se había liado con una chica que era amiga de la infancia de mi prima. ¿Por qué siempre hacía lo mismo? ¿No podía buscarse una chica de novia en vez de estar con tantas chicas distintas? Por lo menos con una novia formal me molestaría menos saber que no era para mí... Lo peor era estar enamorada de él sabiendo que aunque lo consiguiera, solo sería por un día, ya que al siguiente tendría a otra. ¿Por qué no podía olvidarlo de una maldita vez? Me estaba destruyendo yo sola por dentro y lo peor era que no podía remediarlo, aunque quisiera... ¿Conseguiría algún día quitarme este sentimiento de encima? Lo dudaba pero por mi misma debía hacerlo, o nunca sería feliz. ¿Que podía hacer?
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Narrado por Ashley:
Fred había vuelto a aparecer en mi vida de la forma más inesperada, pero no me disgustaba que lo hubiera echo, me sentía cómoda con él, y habíamos tenido una bonita relación mientras duró... Y lo cierto es que me había pasado algo similar cuando cortamos, pero cuando lo intenté arreglar fue demasiado tarde... Aunque parecía que seguía sintiendo algo por mí. ¿Me estaría equivocando? Siempre dicen que donde hubo fuego cenizas quedan, pero... en mi caso no era así... Quizá porque aún me importaba demasiado Christian todavía como para pensar en nadie más que no fuera él.
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Narrado por Christian:
La echaba de menos. Mucho. Como nunca antes había extrañado a nadie, y lo peor, era que no sabía nada de ella desde que me había dicho que tenía que tomarse un tiempo para dejar de pensar que siempre lo fastidiaba, y ya me estaba empezando a preocupar. ¿Y si no volvía conmigo? ¿Y si todo había sido una excusa para irse con otro? No, ella nunca me haría eso... ¿verdad?
Lo peor es que no podía llamarla, ni ir hasta su casa porque quería que pensara todo con calma, y así solo conseguiría presionarla y obligarla a tomar una decisión demasiado rápido, y quizá, equivocada.
Lo malo es que me estaba poniendo histérico, y no era racional cuando me ponía así... Tenía que calmarme si quería salvar lo que teníamos. Me tumbé en la cama y puse música, para ver si así podía olvidarme aunque fuera un rato del tema o, al menos, relajarme. Tenía que desconectar de todo... y al final parece que lo conseguí, porque me quedé dormido por una vez desde hacía dos días...
A la mañana siguiente decidí salir a hacer footing. Me puse el chándal y mis deportivas favoritas y salí de casa. Esta vez, no lo pude evitar. Después de pasar por el parque que está enfrente de mi casa, me dirigí a la dirección de Ashley. No tenía pensado entrar, solo verla, si podía, desde la ventana de su habitación, sin que ella se diera cuenta, para saber si estaba bien.
Cuando por fin llegué, a pesar de todos los intentos porque nadie me descubriera, alguien lo hizo: su madre. Me dijo que se había puesto enferma y que ahora estaba en la cama, hablando con el hijo de una amiga de ella, que al parecer ya conocía de antes.
Esto me alarmó, porque yo no conocía a ese chico, y a saber lo que le podía hacer, más estando enferma, y aparte... ¿de que la conocía? Todo esto hizo que a pesar de que había jurado y perjurado que no la molestaría hasta que ella tomara la iniciativa, entrara en su habitación.
Cuando entré, descubrí que no había errado en mi decisión, pues aquel chico era, nada más y nada menos que el ex-novio de mi chica.
No me podía creer aquello: ¿que hacía él allí? Hacía años que no se veían, ¿por qué ahora?
Se hizo un silencio incómodo en aquella habitación, que ahora parecía el doble o el triple de grande de lo que era.
Por fin Ashley decidió romper el hielo.
Ashley: ¡Christian! Que alegría que me hayas venido a visitar, tenía ganas de verte.
Christian: ¿Segura? Porque parecía que estabas pasándolo muy bien hasta que he entrado
Ashley: No digas tonterías, anda.
Christian: ¿¡Que no diga tonterías!? Claro, es que me tranquiliza mucho saber que estás enferma en la cama y con tu ex aquí presente cuidándote, cuando soy yo el que debería hacerlo, pero ni siquiera me llamaste para decirme que estabas enferma.
Ashley: Tranquilízate, por favor te lo pido. No quería preocuparte, y por eso no te llamé. Y Fred ha venido con su madre, que resulta es amiga de la mía, pero ninguno sabíamos que nos íbamos a encontrar, ¿vale?
Christian: No aguanto más con estas dudas, de verdad, Ashley, mira si me vas a tener medio año esperando a saber lo que has decidido, entonces, creo que es mejor preguntarte que vas a hacer.
Ashley: ¿Qué has querido decir con eso?
Christian: Que o me das una respuesta ya o me voy, pero esta vez para siempre.
Ashley: Mira, yo te quiero muchísimo, pero... no me gusta que vengan a exigirme nada, así que si no puedes esperar a que te de una respuesta, entonces realmente es mejor que desaparezcas de mi vida y no vuelvas más, así no sufriré viéndote cada día.
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 ¿Con quién quieres que acabe Ashley? Vota en la encuesta, me importa saber vuestra opinión, porque puede cambiar la historia según lo que voteis XD

Capitulo 21: Encuentros insospechados...

Narrado por Ashley:
Me fui a dormir, aunque reconozco que no lo conseguí.Lo de Christian me había sentado peor de lo que pensaba. Sabia que estaba enamorada de el, ¿por que seria tan cabezota? Mañana hablaría con el gracias a nuestra "cita a ciegas" y le diría que olvidara todo lo que había pasado el otro día, que fue simplemente un momento de debilidad por mi parte, y que ya lo había superado... Esta vez había sido por mi culpa, pero lo solucionaría, fuera como fuese. No sabía que no iba a ser tan fácil como parecía...
A la mañana siguiente,cuando me levanté, me encontraba fatal, tanto, que no pude ir al instituto y mucho menos a la cita, y como consecuencia reconciliarme con Christian.
Sin embargo, por la tarde, recibiría una visita inesperada: una de las amigas de mi madre había venido a verla, y traía consigo a su hijo, que pronto sabría quién era...
Mamá: Cariño, quiero que conozcas a una de mis mejores amigas, Charlotte. Ha venido unos días a visitarme, y como se ha enterado que estabas enferma, ha pasado a desearte que te recuperes.
Ashley: Bueno... Hazla pasar entonces.
Cuando apareció por aquella puerta, me recordó mucho a alguien aunque no sabía exactamente a quién...
Charlotte: Encantada de conocerte Ashley, creo que tu madre se quedó corta cuando te describió
Ashley: Jajajajaja, si suele pasar, siempre me infravalora.
Charlotte: Bueno, el caso es que yo también tengo un hijo de tu edad, me gustaría que lo conocieras, pasa  Fred
Ese nombre... y esa amiga de mi madre... No podía ser, dime que no...
Fred: ¿Ashley?
Lo sabía, lo sabía y lo sabía, era él, ¿por qué la vida me hacía esto justo ahora?
Ashley & Fred: ¿Qué haces tu aquí?
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Narrado por Fred:
No podía creerme el reencuentro tan inesperado que la vida me había preparado... Después de casi tres años, volvía a mi vida, y aunque me hice el enfadado en ese momento, lo cierto es que en realidad estaba deseando volver a verla desde hacia mucho tiempo, no la había olvidado todavía y ahora tenía una pequeña oportunidad para que las cosas volvieran a ser como antes, y no la iba a desaprovechar, eso seguro. Llevaba años pensando en ella y amándola a pesar de que lo habíamos dejado... no podía evitarlo, no controlaba mis sentimientos, sino más bien al contrario, ellos me controlaban a mi... Pero esta vez se lo agradecía, ya que podía intentarlo una última vez, y si no lo conseguía, entonces esta vez intentaría olvidarme de ella para siempre... Cuando nuestras madres se fueron, empecé a hablar.
Fred: No me puedo creer que después de tanto tiempo vuelva a verte, con lo que me había costado olvidarte...
Mentira. Ambos lo sabíamos, lo notaba en su cara. Aparte yo no era buen mentiroso...
Ashley: Vamos, no mientas, que te conozco demasiado. ¿No es increíble que aunque estuviéramos saliendo durante tanto tiempo ni siquiera sabía que Charlotte era tu madre?
Fred: Si eso te importa tanto...
Ashley: Lo cierto es que sí, porque eso significa que no me tomé nuestra relación tan en serio como creía
Fred: Eso no es verdad... Fui yo el que no hizo las cosas como debía...
No había podido aguantarme más, ahora ya quedaba claro que me seguía importando mucho, y no me molestaba que lo supiera.
Ashley: ¿Tú crees? Yo siempre fastidio todas las relaciones,aunque me importe mucho la persona con la que estoy, no sé como lo hago... Soy demasiado cabezota, y me dejo llevar excesivamente por mis impulsos...
Fred: Yo no opino lo mismo, pero parece que te haya pasado algo malo, me lo puedes contar si quieres...
Ashley: No sería justo para ti, además después de tanto tiempo, me cuesta coger tanta confianza contigo como para contártelo.
Fred: ¿ Y quién mejor que yo? Sé como eres en todos los aspectos, y más te conozco de novia, con lo que creo que puedo ayudarte...
Ashley: Bueno, quizá tengas razón... No sé... Está bien te lo cuento, espero que puedas ayudarme.
Comenzó a decirme todo lo que le había pasado con ese tal Christian. Lo cierto es que me recordaba mucho a nosotros, y a como terminamos. Sin embargo, con él parecía que verdaderamente quería arreglarlo...
Como echaba de menos esa época... Justo en ese momento sonó una canción que le dediqué hacía mucho tiempo, parecía que aún le gustaba... Lo cierto es que definía exactamente lo que sentía hacia ella

Capítulo 20: Te amo, pero...

Narrado por Courtney:
El chico de la fiesta me había llamado como unas 30 veces.. ¿es que no se daba cuenta de que a mi ya no me interesaba, o qué? Solo quería pasar un buen rato, nada más... pero parecía que él no lo entendía. Sin embargo, reconozco que me hacía sentir muy bien que me hubiera llamado tantas veces, y mandado tanto mensajes, se notaba que era espacial para él, y me trataba muy bien.. Lo cierto es que estaba empezando a arrepentirme de la decisión de no verle nunca más, pero no estaba segura del todo de sí era lo más conveniente empezar una relación con alguien que apenas conocía... Tendría que pensarlo y, la verdad, me llevaría un tiempo decidirme...
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Narrado por Ashley:
A los cinco minutos estaba deseando llamarle para decirle que sabía que estaba equivocada y que me perdonara, pero mi orgullo (y mi cabezonería) me impedía hacerlo, aunque quisiera.

No obstante, seguía teniendo ese sentimiento de ser la que descuidaba nuestra pareja y la que un día tendría la culpa de que se hubiera roto, aunque... ¿No la tenía ya, y no precisamente por eso?

Entonces lo entendí, yo solo tendría la culpa de que nuestra relación no funcionaba si seguía ofuscada en mis paranoias, y en mis tonterías, así es como realmente estaba destruyendo nuestra pareja, no por no saber cuidarla ni por no poder hacer nunca nada por él… Mañana con toda seguridad hablaría con él, pero no iba a ser yo quién lo citara… le daría una sorpresa, y así le haría más ilusión. ¿ Y era yo la que nunca sabía ni hacía nada por él? En este momento demostraba lo contrario, y sabía que entonces todo me lo había imaginado…

¡Cuantas ganas tenía de verlo! Esperaba que me perdonase, y que siguiéramos como hasta ahora.

Llamé a Jenny, ella me ayudaría con lo de la “cita a ciegas” con Christian.

Ashley: Hola mi niña

Jenny: Cielo, hacía tiempo que no me llamabas, ¿querías algo?

Ashley: Sí, siento tener que pedírtelo así, de sopetón, pero… ¿mañana le podrías decir a Christian si podéis quedar y cuando sea la hora, que vaya yo? Es que nos enfadamos, y bueno, quería darle una sorpresa y…

No sé cuanto tiempo más seguí hablando, hasta que Jenny me interrumpió.

Jenny: Está bien cariño, no te preocupes, ¿vale? Suerte, aunque no creo que la necesiteís porque seguro que mañana todo sale bien. Chao, nos vemos mañana en el Inti

Ashley: Hasta mañana, te quiero.

Jenny: Y yo

Colgamos y no sé por qué, se me dibujó en mi rostro una cara de satisfacción que no pude quitar durante el resto del día.

Aunque en unos días, para mi nada volvería a ser igual… Pasarían demasiadas cosas que harían que mi vida cambiara por completo, sin yo poder evitarlo, y quizá ese enfado iba a repercutir en el futuro más de lo que me había imaginado… Todo daría un giro de 360º y yo aún no estaba lista para afrontarlo…

Capitulo 19: Otros sentimientos diferentes..

Narrado por Max:

Ella estaba a punto de llegar, solo quedaban 5 minutos... estaba muy nervioso, aunque no sabía por qué, habíamos discutido antes y después habíamos hablado de ello ¿por qué esta vez estaba más nervioso que las demás? ¿Quizás había empezado a quererla, aunque fuera un poco, más que antes? ¿O era que esta vez me asolaba el miedo de perderla para siempre, por nuestros diferentes estilos de ser... como siempre pensé que algún día pasaría, pero esperaba que no fuera así nunca? Éramos muy distintos, no coincidíamos en nada, y sin embargo era lo que más me gustaba, pero a la vez, lo que menos, porque nuestras diferencias algún día podrían ser lo demasiado grandes como para que fuera imposible el ver más allá de ellas y seguir... seguir adelante como siempre habíamos echo a pesar de todo... Lo cierto es que no sé por qué motivo, hoy estaba pensando en ello más de lo normal… O más bien después de lo de la fiesta, seguramente porque desde entonces pensé que no estaba dispuesta a jugarse por mí, y que igual no me amaba tanto como decía… Aún me quedaban 4 minutos para descubrir si en verdad estaba en lo cierto o me estaba equivocando.

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Narrado por Jenny:

Sí mamá, sí papá. Esas eran la únicas palabras que conocía cuando era pequeña, no salía nada más de mi boca… hasta que el secreto de uno de mis padres salió a la luz y entonces creí que tal vez habría más palabras en el mundo, como la palabra NO.

Puede parecer algo estúpido lo que puede marcar una mala experiencia, hasta el punto de hacerte cambiar radicalmente tu forma de ser, y sin embargo a los que la vivimos no nos parece algo tan tonto como se ve desde fuera.

Desde hace casi 8 años, me volví una chica que siempre trataba de conseguir lo que fuera de la gente, como en el fondo, aún sin saberlo, había aprendido desde que nací. Pero yo no era así… ¿volvería algún día a ser lo que era antes? Podía ser…

En el fondo, ya estaba empezando a ser diferente, sin darme cuenta. Cuando el día de la fiesta salí, fue por hacerle un favor a alguien, y cuando dejé solos a Ashley y Christian, lo hice porque quería a mi amiga, aunque no lo demostrara muy a menudo, y sabía que así sería feliz. Quería ser el tipo de persona amiga de sus amigos, que hace cosas por los demás… y poco a poco lo estaba consiguiendo… Y quizá también así consiguiera llamar su atención… Oye, también tenía que pensar un poco en mí ¿no? Merecía empezar a disfrutar de mi vida.

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Narrado por Jennette:

Le estaba muy agradecida a Ashley, aunque no lo supiera ni fuera a decírselo. Me había abierto los ojos, sin darse cuenta. Lo cierto es que Andrew era el primer chico por el que había sentido algo de verdad, y estaba dispuesta a todo por conseguirlo, pero nunca más lloraría por él, si no se fijaba en mí, tenía decidido hacer borrón y cuenta nueva, y fijarme en otro chico, sin derramar una sola lágrima, y aunque sabía que por ahora no estaba capacitada para ello, pronto lo estaría… No me iba a dejar margar mi adolescencia solo por un tonto amorío, y ya iba siendo hora de que me diera cuenta y actuara en consecuencia, además, si tantos chicos estaban detrás de mi siempre podría estar con él si Andrew pasaba, digo yo… Ellos me mandaban flores, bombones y cartas por San Valentín, y estaba claro que me admiraban, y eso es lo que yo necesitaba para consolarme de mi desengaño en un futuro…

Capitulo 18: El primer enfado puede ser el último... en muchos aspectos

Christian no pudo aguantar ni 5 minutos calmados en cuanto se enteró, comenzó a maldecir contra todo lo que se le ocurrió, por suerte, como estaba en mi casa se controló, pero sabía que necesitaba desahogarse, aunque en este caso yo no podía ayudarle porque estaba peor que él, aunque aparentaba lo contrario..

Cuando por fin se relajó algo más, hablamos por primera vez después de casi media hora.

Christian: Siento lo de la fiesta de mi hermano, en serio, sabes que preferiría pasar el sábado contigo y ver lo que me tenías planeado, pero entiéndeme, no puedo hacer nada, mi hermano es mi hermano, y mi madre no me permitiría faltar, aparte de que yo no me lo perdonaría. Siento haberte gritado así, y ponerme como me puse, no quería que me vieras así, pero realmente me ha sentado muy mal y... Bueno, no he podido evitar comportarme así, lo siento

Ashley: No te preocupes, te perdono, no pasa nada, pero lo que pasa es que tú siempre tienes detalles conmigo, que yo aprecio, muchísimo y lo sabes, pero cada vez que soy yo la que intento hacer algo para ti, siempre se fastidia, y la verdad, ya no lo soporto más, porque esta vez no es la primera, y tampoco será la última, en verano intenté muchas veces hacer algo, y nunca salió bien, parece que eres tú el que tiene detalles, el que cuida la relación, y yo la que paso de todo, la que nunca tiene un mínimo detalle con su chico…

Estaba a punto de ponerme a llorar, porque decir todo eso, reconocer lo que me pasaba, me recordaba ese sentimiento aún más, y me hacía daño, en ese momento yo misma me estaba destruyendo… Y era demasiado dolor que aguantar, y al final, cuando no pude más, exploté

Ashley: ¿Sabes que te digo? Que hasta aquí llegué. No aguanto más esta situación

Christian: Pero ¿por qué? Si sabes que todo lo que has dicho antes no es verdad, que a ti también te importa esta relación tanto o más que a mí, y qe siempre tratas de hacer cosas por mí.

Ashley: Lo sé, pero yo me siento así, no puedo evitarlo, por eso es mejor que nos demos un tiempo, necesito aparcar este sentimiento de que nunca hago nada por ti ni nada a derechas cuando se trata de nosotros.

Christian: Pero... pero... No. No pienso dejarte marchar así, ¿acaso no es más importante lo que me quieres, lo que sientes por mí, que esa tontería que piensas y con la que te has obsesionado, que por otra parte, no es cierta?

Ashley: Pues... sí, pero no quiero hacerte daño por una tontería mía, por eso es mejor que te alejes de mí...

Christian: Esta bien, piensa el tiempo que te haga falta, no me preocupa, pero que sepas que yo te esperaré mientras tomas tu decisión.

Lo cierto es que en el fondo sus palabras siempre conseguían levantarme el ánimo y esta vez, no fue menos, aunque fueran solo cinco minutos. Él se marchó de mi casa, pero yo me quedé en mi habitación, pensativa, disfrutando a solas de todo lo que había echo por mí, de esos pétalos, que cogía entre mis manos, de esos peluches, a los que acariciaba sin desdibujar aquél corazón formado con ellos, de esas velas encendidas que transmitían paz a aquél sitio oscuro, de aquél peluche que unas horas antes me había regalado, pero sobre todo, de lo feliz que me sentía con todo esto. Y de él, de Christian era de lo que más disfrutaba en esos momentos, su colonia aún olía por mi habitación, y el recuerdo de nuestros momentos aún seguía allí, y no se iba a borrar... ¿Por qué habré sido tan estúpida?- me preguntaba en aquel momento, en el que no pude encontrar la respuesta.

Capitulo 17: Algo se tuerce

Narrado por Ashley:

Al cabo de un rato de estar en mi habitación compartiendo momentos que nunca olvidaría, empecé a prepararme. Le dije que salía un momento a comprar unas cosas (cosa que en el fondo no era mentira) y que volvería en cuanto pudiera, pero que no tardaría mucho, que me esperara. Llamé a mi contacto y me dijo que le sobraban exactamente 2 entradas, así que mañana podía pasarme a por ellas, siempre y cuando, obviamente, pagara los 20 euros que costaba cada una, porque aunque me las dejaba a buen precio, aún costaban lo suyo, pero como tenía dinero, no tenía problema en pagar 40 euros por las entradas, si eso significaba hacer feliz a Christian. Ahora solo me faltaba pedirle a mi madre si nos podía llevar el sábado a Lugo, ya que allí era el partido, así que eso hice.

Ashley: Hola mamá

Mamá: Hola hija, ¿Qué quieres?

Ashley: Verás, es que este fin de semana me gustaría estar con Christian fuera de la ciudad, ¿nos podrías llevar a Lugo? Por cierto, a él no le digas nada, que es una sorpresa.

Mamá: Está bien, os llevo, conste que es porque le quieres dar una sorpresa a Christian, y sé que él es un buen chico y cuidará de ti, que si no…

Ashley: Gracias mamá – dije, con voz de enfadada, aunque en realidad no lo estaba, porque sabía que mi madre no lo había dicho en serio-.

Colgué el teléfono y me dirigí a mi casa, más contenta que nunca.

Ya tenía todo programado para nuestro finde "futbolístico", mi contacto había conseguido dos entradas V.I.P que nos permitirían ver el estadio después del partido y estar cerca de los jugadores para pedirles un autógrafo en el balón.

Por desgracia para mí, no había contado con el hermano pequeño de Christian, que acabaría por fastidiar todos los planes que había echo y que tanto me habían costado…

Cuando por fin llegué a casa, fuii derecha a mi habitación, y le di un beso rápido a Christian

Christian: Mi amor, vendrás conmigo el fin de semana que viene ¿no?

No sabía de qué hablaba, pero me estaba empezando a preocupar que interfiriera con el partido, y en mayor medida, con la tarde especial qe había organizado.

Ashley: ¿A donde cariño? ¿Qué pasa?

Christian: Pues verás, el caso es que no quería decírtelo, pero... el próximo fin de semana es la fiesta de cumpleaños de mi hermano pequeño, y como mis padres se han enterado que estoy saliendo con alguien pues... han querido conocer a mi novia y la fiesta de mi querido hermanito ha sido la excusa perfecta... Lo siento, en serio, no quería que vinieras porque sé que te vas a aburrir, y…

Continuó hablando, pero lo cierto es que yo ya no lo escuchaba, todas mis esperanzas, mis sueños… se habían desvanecido en un segundo y me empecé a poner muy furiosa… Tanto que cualquier persona hubiera notado que me empezó a hervir la sangre. Estaba muy cabreada y a pesar de que Christian no tenía la culpa de que mis planes no salieran como había querido, pagué mi enfado con él.

Christian: Cariño, ¿me estás escuchando?

Ashley: ¡Pues claro que te estoy escuchando! ¡Idiota! ¡¿Podías haberme avisado antes no?!

Christian: No pude hacer nada, no obstante ¿se puede saber que te pasa?! ¡Si estás enfadada por algo no la pagues conmigo!

Ashley: ¡Es que tu tienes la culpa!

Christian: ¡¿Qué he echo ahora?!

Ashley: ¡Había programado un sábado perfecto para los dos, romántico, yendo a ver tu equipo de fútbol por ti, porque siempre estás haciendo cosas por mí y tú lo has estropeado!

Lo había soltado, porque en ese momento ni siquiera pensaba lo que decía, y se me escapó sin querer, de golpe, y Christian tenía una cara de... mezcla de sorpresa, rabia y confusión, pero sobre todo de decepción, quizá mayor de la que yo sentía. Aún estaba centrándose en lo que acaba de pasar, y lo cierto es que cuando reaccionó, no lo hizo demasiado bien…

Capitulo 16: La sorpresa...

Y lo cierto es que ya sabía lo que hacer. El próximo sábado jugaba su equipo de fútbol favorito en Galicia, y sabía que tenía muchas ganas de ir, de hecho había tratado por todos los medios de conseguir las entradas para el partido, pero por desgracia ya no quedaban. Sin embargo, yo conocía a alguien que casi con total seguridad tendría de sobra, y si no sabría donde podía conseguirlas, y a un precio bastante asequible. Sin embargo, eso era solo el comienzo, tenía que convertir ese día en el mejor de su vida, y yo podía hacer mucho más que simplemente llevarlo hasta allí. Tenía que conseguir que ese día que ya comenzaría bien, y más aún si ganaba su equipo de fútbol, fuera inolvidable, quisiera que lo llevara guardado en su corazón por siempre. Estuve un rato dándole vueltas a la cabeza, sin prestarle atención a nada, ausente... Y obviamente, cuando Christian se dio cuenta, no tardó en sacarme de mis pensamientos

Christian: Cariño, ¿estás bien?

Ashley: ¿Eh? – Tardé unos segundos en bajar a la tierra de mis pensamientos sobre el partido, y darme cuenta de la pregunta de Christian- Sí, mi amor, estoy bien, ¿por?

Christian: Pues porque desde hace un rato estás como ausente y no me estás prestando atención…

Después de eso, puso cara de pena, la típica cara de cachorrito, y la verdad que no pude más que reírme, y centrarme un poco más en él, si no quería que sospechara claro… Aunque también reconozco que no podía negarle nada, y mucho menos si era mi atención, así que, sin decir nada, me acerqué despacio hacia él, y le di un beso dulce, suave, tierno, como los de las películas románticas al final de estas. Estuvimos un rato besándonos, y cuando nos separamos, se me ocurrió la idea que me había pasado toda la tarde buscando…

Él conocería a los jugadores de su equipo español de fútbol favorito (recordad que él es australiano, y si queréis saber cómo nos entendemos, pronto lo sabréis XD) y le firmarían el balón que tenía desde hace tantos años y que era tan importante para él..., me encargaría de eso personalmente, aunque tuviera que remover cielo y tierra para ello, no me importaba, por él hacía eso y más, aunque pudiera parecer algo imposible lo que me pidiera…

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Narrado por Max:

La llamé como unas 15, 20 veces, pero no me lo cogió. Cuando estaba haciendo la que había decidido sería la última llamada y a punto de colgar, a punto de desistir, por fn, después de todo ese rato, me contestó.

Xxx: Hola mi amor, ¿querías algo? Es raro que me llames, y más a estas horas.

Max: Sí, quiero hablar contigo, y sabes de qué, y no hagas como que no sabes de que hablo, como otras veces, en serio, es importante…

Xxx: No podía salir aquél día, delante de tanta gente, mirándome y haciéndose preguntas, hablando de nosotros… no estaba preparada emocionalmente, entiéndeme

Max: Cariño, sabes que te entiendo, sé como eres y por eso no te lo reprocho, pero quiero que estemos bien, porque enviaste a la amiga de mi hermana, y bueno… no sigo con lo que pasó, porque te harás a la idea, por eso tenemos que hablar.

Xxx: Está bien, me pasaré por allí, yo también quiero que nos arreglemos porque te quiero… ¿a que hora te viene bien?

Max: ´¿En una hora está bien?

Xxx: Si, en una hora está bien. No faltaré, lo prometo.

Max: Lo sé. Te amo, mi niña, nunca lo olvides, por muchos obstáculos que tengamos…

Bueno, al menos ya sabía seguro vendría, y podríamos hablar tranquilamente, como llevaba esperando desde la fiesta. La quería mucho, y ella a mi también, pero éramos demasiado diferentes, y si ya teníamos estos enfados, no era extraño que tarde o temprano, surgiera un abismo demasiado grande entre nosotros por eso teníamos que luchar por nuestra relación, arreglar esto, para que ese abismo no surgiera, para estar los dos como al principio, sin complicaciones, sin trabas, sin preocupaciones. Para estar solo ella y yo, como tenía que ser, como los dos deseábamos que fuera... y, por desgracia, para que eso pudiera pasar, ella tenía que decirle a mi hermana que era la que ocupaba mi corazón, y hasta que no lo hiciera siempre habría un impedimento para estar juntos…

Capitulo 15: Continua la tarde romántica...

El suelo estaba todo lleno de pétalos de distintas flores, después mis peluches (incluido el gigante que me acababa de traer) estaban en la cama todos formando un corazón, había velas por todas partes y él había elegido la música romántica que a mi más me gustaba. Podía pedir algo mejor para pasara una tarde de domingo? Cada vez estaba más sorprendida de lo que mi chico era capaz de hacer, y la verdad, en ese mismo momento no pude evitar lanzarme y darle un besazo a mi niño. ¡Cuanto lo quería! Y más cuando hacía cosas como esta... eran tan detallista... a veces no me podía creer la suerte que tenía de tenerlo como novio, parecía un sueño
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Narrado por Christian:
Me apetecía hacerle un detalle a Ashley, y sabía que era lo que le gustaba, así que me puse manos a la obra, haciendo todo lo posible para crear el ambiente más romántico que se me ocurrió. Al cabo de aproximadamente 10 minutos había acabado. Sé que puede parecer poco tiempo, pero conocía sus gustos a la perfección y aparte estando con ella se me ocurrían ideas románticas que hacerle todo el tiempo...  Se pondría muy contenta al verlo, estoy seguro. Nada me gustaba más que verla feliz, y sabía que esto haría que sonriera, que me deleitara con esa felicidad que demostraría. ¿La quería? sin ninguna duda, incluso quizá sentía más por ella, diría que la amaba, y eso era algo que no podía evitar...desde el primer día que la vi, me gustó, y cuando fui conociéndola, ese sentimiento creció mucho más. Era tan linda, me encantaba cuando sonreía, cuando jugueteaba con su pelo, cuando me miraba con sus ojos azules tan profundos...
Era la primera vez que sentía algo así por alguien, y no iba a dejarla escapar fácilmente... era mía solo mía y nadie me la iba a arrebatar, por lo menos sin luchar por ella.
Estaba a punto de llegar, oía sus pasos... Ahora tocaba apagar la luz y encender las velas, mostrando todo lo demás que había preparado.
En cuanto vio todo se me abalanzó y me dio un beso que me dejó sin respiración. Me acababa de hacer el hombre más feliz del mundo con algo que parece tan insignificante al simple ojo humano, pero tan grande cuando no se ve con los ojos, sino con el corazón, con los sentimientos más puros que se puedan tener... Y así lo estaba yo en este caso, viviendo en primera persona la alegría del amor y de estar enamorado, la felicidad más grande que existe, y yo en ese momento, rebosaba de ella...
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Después del beso, no supe que hacer. Sé que el sabía que me había encantado, yo misma se lo había demostrado, pero también quería expresárselo de otra manera, que en aquél momento no pude , ya que no podía articular palabra. Estaba tan emocionada que no me salían las palabras de la boca. Estaba emocionada, extasiada, más todavía que eso. Pero él siempre era el que hacía algo por mi, ahora me tocaba a mi hacer algo por él, aunque no lo supiera... Se lo merecía, por todas las veces que me había apoyado, que había estad a mi lado, por todas esas veces que había echo cosas tan espectaculares como esta, por tantas y tantas cosas... Y yo soy de las que siempre les ha gustado recibir, pero también dar lo que puedan, y más en las relaciones, me gustaba agradar a la persona con la que estaba a base de detalles, y la verdad, con él hasta ahora no había tenido muchos, y creía que iba siendo hora de hacer algo por él que lo hiciera feliz, como él a mi, por todo el amor que sentía, y por todo lo que él me había demostrado siempre...

Capitulo 14: Tarde de Domingo

A la mañana siguiente me levanté tarde, ya que era domingo. Lo cierto es que hoy no tenía ninguna intención de salir de casa, estaba muy cansada del día anterior,la fiesta, los desmayos, todas las emociones que había tenido... así que hoy me quedaría en casa, con mi bata de Hello Kitty, tomando un chocolate caliente y viendo una de mis películas favoritas: "Perdona Si Te Llamo Amor", que trata de una chica de 17 años que se enamora de un publicista mucho mayor que ella. La primera vez que la vi fue después de leerme el libro de Federicco Moccia, que me encantó, en el que se basaba la película con el mismo nombre, aunque había algunas escenas que estaría bien que hubieran puesto en la película que están en el libro y que eran preciosas y muy románticas, pero por algún motivo, les parecerían menos importantes a los guionistas, que le vamos a hacer... La película nunca es lo mismo que libro del que proviene...

Justo cuando estaba a punto de poner la película, llamaron al timbre ¿Quién sería?
Me levanté del sofá y fui a abrir. Al hacerlo me encontré con un osos de peluche enorme con un corazón en medio que ponía con letras grandes "TE QUIERO", y detrás me encontré a Christian y a mis amigas: Jenny, Lucy y Mery, y mis primas.
Lo cierto es que aunque no me apetecía estar con nadie, aquel detalle me había llegado y no pude menos que invitarlos a entrar a entrar y ver la película juntos.
Preparé las palomitas en el microondas y las eché en un bol que encontré en el armario de la cocina. Como siempre, quedaron algunas sin hacer, eso era inevitable.
Después me dirigí al salón por segunda vez en toda lo  que llevaba de día y una vez allí, le di al play y la película empezó; una hora y media en la que no aparte mi vista de esa preciosa obra del cine... ¿o debería decir que había algo de lo que no aparté mis ojos durante el rato que duró? Creo que basta decir que estuvimos muy cariñosos Christian y yo ;) , ahora ya me entendéis...
Cuando acabó la película, Jenny, mis amigas y mis primas se fueron a casa, y nos dejaron a Christian y a mi solos. La verdad es que no había dicho nada, pero el caso es que estaba deseando que se fueran de una vez, después de las miraditas que nos habíamos dirigido, de los disimulados y tímidos roces que nos habíamos dedicado, era nuestros tiempo para estar solos, y parece ser que las chicas lo entendieron a la perfección.
Jenny: Bueno, preciosa, nosotras nos marchamos, que tenemos cosas que hacer, y como ya te hemos visto durante un rato nos basta, os dejamos solos, ¿no hagáis nada raro eh?
Meaghan: Jajajaja, sí, nosotras nos vamos, pero no mientas Jenny... sabemos que no es porque tengamos algo que hacer, y ellos también se han dado cuenta de lo que pretendes...
Jess: Sí, no engañas a nadie, aunque lo intentes, quieres dejarlos solos para que pasen la tarde romántica que se merecen
Jennyfer se puso colorada, la verdad es que me divertía verla así. Después de aquella extraña y peculiar "discusión", nos despedimos con dos besos, y por fin nos quedamos solos mi novio y yo, pues mis padres habían salido con unos amigos, y  mi hermano estaba en la universidad de vuelta, por lo que teníamos aproximadamente una hora y media para hacer lo que quisiéramos sin que nadie nos incordiara
Christian: Bueno, ahora que nos han dejado solitos... ¿qué te apetece hacer?
Ashley: Umm, bueno, como son las seis de la tarde, y hace algo de frío, yo tenía planeado tomarme un chocolate con churros, ¿ te parece si preparo uno, lo compartimos y pongo un poco de música? (romántica, por supuesto ;) )
Christian: Me encanta la idea, vete preparando el chocolate y mientras yo voy preparando a tu habitación preparando un poco el ambiente
Yo me fui a la cocina y fui sacando los ingredientes para preparar el chocolate líquido. Al cabo de quince minutos había acabado y reconozco que no me había quedado mal. Cogí la bandeja, puse servilletas y cucharillas, y fui hasta mi habitación. Cuando abrí la puerta no me pude creer lo que vi....
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Os recomiendo ver esta película, os paso el link por si os apetece:
http://www.megavideo.com/?v=LA53T0I9
en cinetube la tenéis para descargar (lo digo por megavideo y su límite de 72 minutos o simplemente por si os apetece tenerla)
También hay segunda parte: Perdona pero quiero casarme contigo, en cinetube encontaréís las 2 ^^

Capitulo 13: Momentos especiales

Christian: Si, y creo que ya sé de que manera podemos hacer de esta noche una noche mágica. Espérame, ahora vengo.
Se fue por el camino de la derecha dejándome sola. La verdad, no quería decirle nada, pero la verdad es que ahora mismo no podía ni moverme del miedo que tenía. A algunos os parecerá una tontería, pero yo lo estaba pasando realmente mal, y aunque Christian solo tardó 2 o 3 minutos en volver, fueron los minutos más largos de mi vida. Por suerte, al poco lo vi llegar, y esa sensación desapareció por completo. Venía con algo entre las manos, pero con tanta oscuridad, no acertaba a ver que era, hasta que se acerco más
Era una flor, concretamente una amapola, mi preferida, y me la colocó entre los mechones de mi pelo. Realmente hizo la noche más especial, no por la flor ni por ponérmela, sino por lo que dijo después:
Christian: Cariño, asegúrate de cuidar muy bien de esta flor, porque es el símbolo de nuestro amor. Sé que durará y que la cuidarás, igual que de nuestra relación, y el día que esta flor se marchite, significará que nuestro amor se acabó.
Sé lo que estáis pensando, una flor arrancada del césped de un parque no dura mucho, así que iba apañada si se supone que cuando se marchitara la flor era porque entre nosotros todo había terminado. Bueno, no solo cuidé la flor, sino que nunca se ha marchitado, es el día de hoy que todavía la tengo. Pero lo más importante es la metáfora: las relaciones en parte son como una planta, hay que cuidarlas, mimarlas, atenderlas todos los días, porque si las dejas de lado, si no les haces caso, se acabará perdiendo, como una planta que va enfermando por dentro hasta que se acaba marchitando.
Pero volvamos a la escena en el parque. Yo estaba muy feliz por aquello, y realmente ahora podía volver a casa, aunque claro, no sin antes, despedirme de mi chico con un apasionada beso después de acompañarme hasta el portal.
Ashley: Te quiero, nunca lo olvides... Nos vemos mañana, adiós mi amor.
Él me respondió con otro beso, quizá más intenso que el mío.
Christian: No sé como voy a hacer esta noche para dormir, si no consigo separarme de ti... Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, te amo, más que a nada.
Puff ¿como os sentiríais vosotras después de una noche como aquella y una despedida tan bonita? Porque desde luego, yo no pude dormir en toda la noche de lo emocionada que estaba por todo lo que me había pasado, Lo cierto es que no podía pensar en otra cosa que no fuera él y esa noche en que lo había recuperado, aunque también había recibido alguna que otra sorpresa inesperada...
Sin embargo, no sabía que en el otro extremo de la ciudad había alguien que también estaba pensando en mí, alguien al que conocía muy bien y al que hacía mucho tiempo que no lo veía, aunque poco tardaría en hacerlo...
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Narrado por Fred:
Había pasado mucho tiempo desde que no la veía, y sin embargo, aún seguía amándola como entonces, a pesar de que ya habían pasado casi 3 años desde que lo dejamos, pero es que no conseguía olvidarla, por mucho que lo intentara. ¿Por qué la dejaría? o mejor pregunta ¿cuál fue el verdadero motivo de que lo dejáramos? Ya ni siquiera me acuerdo, tan traicionera puede llegar a ser la memoria a veces... Lo cierto es que no la había vuelto a ver desde que lo dejamos, una persona normal ya la habría olvidado, ¿no? ¿tan fuerte había sido lo que habíamos vivido? Parece ser que para mi sí. Tenía muchas preguntas en la cabeza, y lo cierto es que solo tenía una manera de responderlas y quitármelas de encima: volviéndola a ver. No había otra manera, tenía que saber si no me estaba obsesionando sin motivo, si tenía alguna esperanza de volver, si seguía siendo la misma por la que tanto suspiraba... Puse la radio y justo estaban echando una de mis canciones favoritas, y me dio por pensar que aquella Carolina era la chica en la que llevaba pensando toda la noche

Capitulo 12: Opiniones...

Narrado por Max:
Aún estaba aturdido por todo lo que había pasado en aquella fiesta, y estaba muy sorprendido por la declaración y la huida de mi hermana, nunca la creí tan valiente como para hacer una cosa así, pero me alegraba por ella. Por desgracia, yo no podía sentirme como se estaba sintiendo ella. Os preguntaréis por qué, pues bien, el motivo es que aunque mi hermana no lo supiera, la chica que había salido cuando presenté a mi novia, Jenny, la mejor amiga de mi hermana, no era la chica de la que estaba enamorado, pero ella no había tenido el suficiente coraje como para salir y había enviado a aquella chica a disculparse, pero mi hermana lo había malinterpretado, o bien para hacerse pasar por ella. En cualquier caso, podría haberme dicho que todavía no estaba preparada, lo hubiera entendido, pero esta vez me había decepcionado... Tendría que hablar con ella, pero por ahora prefería pasar lo que quedaba de noche tranquilo...
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Narrado por Jennette:
Que suerte tenía Ashley, primero salía con Andrew y ahora con ese chico nuevo de intercambio que estaba para comérselo, pero bueno, que le iba a hacer... Yo en el amor no era tan afortunada, y parecía que en la amistad tampoco, porque Courtney había pasado de mi toda la noche, en cuanto un chico le había echo un poco de caso, se había ido con él, aún cuando lo estaba pasando mal por Andrew. En esa ocasión, reconozco que Ashley me había ayudado mucho. Ahora mismo debería de hablar con él, e intentar que se fijara en mí, por lo menos nadie diría que no lo habría intentado. Es lo que tiene estar enamorada... Puedes estar feliz cuando es correspondido, puede ser lo mejor del mundo, pero puedes pasarlo fatal cuando sientes que esa persona no te hace caso, que no te quiere, y así es como me sentía yo en ese momento, pero no pensaba seguir sintiéndome así, le iba a confesar todo lo que sentía, y si no me quería a mi, decidiría olvidarme de él.
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Narrado por Meaghan:
En este momento, admiraba a mi prima. Había sido capaz de declararse delante de un montón de gente sin importarle lo que pensaran y sin vergüenza ninguna. Ojalá yo pudiera, al menos, tener un poco de esa parte valiente que a veces sacaba a la luz. Yo era muy rebelde, y nunca tenía miedo de hacer una locura en el colegio para luchar por lo que yo creía justo, pero cuando se trataba de sentimientos era una persona totalmente diferente, quizá porque nunca me había gustado un chico lo suficiente como para declararme, o porque realmente era tímida cuando se trataba de chicos, la verdad es que no lo sabía, pero lo cierto es que si me gustaría poder encontrar a alguien por el que poder luchar, por el que pudiera jugarme en serio y tener una relación especial...
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Narrado por Courtney:
A pesar de que no estaba fuera, en el jardín, había oído toda la confesión de Ashley, y también las de Edwin y Christian. A pesar de que a mi uno de los chicos que estaba en aquella fiesta había estado ligando conmigo hasta el punto de que había decidido entrar en casa con él para pasar un buen rato, me gustaría mucho encontrar a alguien que me amara tanto como aquellos chicos a ella, porque esto solo había sido un rollo, y la verdad, yo nunca había tenido un novio de verdad, para empezar porque, aunque en el insti voy de ligona, de popular y de diva, en realidad yo no era así, sino todo lo contrario, porque Jennette, a su vez, si era así, y hasta que ella se acercó y me hice amiga suya, la verdad, no sabía lo que era vida social, aunque la verdad, me cansaba un poco el fingir ser lo que yo y todos sabían que no era en realidad... por eso nadie quería estar conmigo ni saber nada de mi, y los pocos que se acercaban era porque querían algo de mi mejor amiga, no de mí, y eso me ponía muy mal...
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No había nadie en aquél parque, ¡menos mal! no quería toparme con la mirada envidiosa de alguno o con la cara de que juventud de alguna persona mayor. Por fin estábamos Christian y yo juntos, aún me parecía un sueño todo aquello, no podía expresar con palabras todo lo que sentía mi corazón en ese momento... Lo amaba, y él a mi, lo sabía, aunque no pudiera decir como. En toda la noche, no paramos de besarnos por aquel romántico parque cubierto de flores, como si fuera un jardín botánico, cada vez que nos girábamos para cambiar lo hacíamos besándonos, creo que no separamos nuestros labios hasta que fue lo suficientemente tarde como para regresar a casa.
Ashley: Mi amor, son casi las dos de la mañana, creo que es hora de regresar a casa, sino en cuanto lleguemos a casa nos van a matar.
Christian: Tienes razón,  aunque querría que esta noche no acabara nunca, te amo mi princesa...
Ashley: Lo sé cariño, yo tampoco querría que terminara, pero bueno... De todos modos, aún podemos hacer esta noche más especial, antes de que acabe...
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Espero que os haya gustado XD
Siento no haber podido empezar hoy con el maratón, pero no he tenido tiempo para hacerlo, de todos modos no os preocupéis que mañana sin falta lo hago, pero recordad que hasta el 30 (aprox.) no podré subir más, así que os aconsejo no leeros todos de golpe.
Como siempre, os kiero mis lector@s, besos a tod@s

Capitulo 11: Todo sale bien... o casi

En cuanto empezó la canción, me cogió de la mano y nos pusimos a bailar. La verdad es que todo eso me traía muy buenos recuerdos de nuestro verano juntos, Él y yo, cuando fuimos a la fiesta de la ciudad y estuvimos bailando tantas canciones, entre ellas, la que ahora mismo estaba sonando de mano de los altavoces que habían colocado cuidadosamente mis primas a ambos lados del escenario en que nos encontrábamos. Por fin, después de unas semanas agotadoras, de tantas preguntas, de tanta incertidumbre, de tantos deseos dejados de lado por cosas triviales, ocultados en un rincón de mi corazón, esa sensación de estar a punto de explotar, todo esos sentimientos que había tenido aquellas semanas y que me habían echo sentir tan mal, esta noche habían desaparecido (o una gran parte al menos, porque aún quedaba por resolver el tema de mi hermano y mi amiga, pero en este momento, eso era algo trivial) y por fin podía por una vez en la vida ser feliz, después de tanto tiempo, la vida me volvía a sonreír y yo no necesitaba más en mi vida, porque ya estaba perfecta tal y como era, y asuntos tan nimios como lo de Jenny y Max, en este mismo momento me traían sin cuidado, no existían para mi. De echo, si mi vida se acabara en este instante, no me importaría, porque ya sabía lo era ser feliz y estar contento con tu vida al máximo. Aunque por desgracia, la felicidad no suele durar mucho, y pronto me daría cuenta de ello... pero por ahora disfrutaba, y nadie me lo iba a arruinar.
La canción terminó, y por fin pudo responderme a mi discurso, después del tiempo que le había tenido allí haciendo tiempo, con el jaleo de Edwin, por fin ya no teníamos que esperar más ninguno de los 2.
Xxx: Ahora que se ha acabado la canción, es mi turno de hablar, después de toda la gente que lo ha echo esta noche. Ashley, desde que te vi, sabía que tú eras la indicada para mí, nunca tuve ninguna duda, a pesar de lo que la vida me hacía creer. Antes de dirigirme, sabía que te necesitaba en mi vida y no podía dejarte escapar, porque serías la mujer de mi vida, la persona que me completaría. No me equivoqué en nada de lo que pensé, pero por desgracia, después de agosto, te marchabas de vuelta a tu tierra. En ese momento me quedé destruido, porque pensé que nunca te volvería a ver... pensé que realmente te perdía, y entonces, después de mucho pensar, tomé una decisión: tenía que ir a buscarte, no podía quedarme de brazos cruzados. Y así lo hice. Vine a tu instituto, me apunté a las mismas clases que tú para poder estar juntos en clase... Pero me olvidé del único detalle importante que me habías contado en verano, tu ya ahora ex novio, Andrew. Sabía que no sentías nada por él, pero me tuve que aguantar todas las ganas de besarte, y todos mis sentimientos, hasta esta noche, en la que por fin te has librado de esa atadura, aunque siempre estuve a tu lado, sin que nadie se diera cuenta, ni tu misma, como cuando te desmayaste por la borrachera. Fui yo el que te cogió y el que cuidó de ti todo el rato, porque no podía dejarte sola. Pero como decía, ya no tengo que reprimirme nada, y lo cierto es, que ya no aguanto más...
Soltó el micrófono de la mano sin importarle ni el ruido que haría ni lo que pudiera molestar a los demás, se acercó a mi, me cogió de la cintura, yo le cogí del cuello, nos miramos a los ojos y nos besamos como hacía tiempo que no nos besamos, y creo que de todos los besos que habíamos tenido, este era el que me había gustado de todos. Hacía mucho que no me sentía así de viva, y no desaproveché la oportunidad. Lo agarré con todas mis fuerzas: no lo iba a volver dejar escapar, lo tenía muy claro, ahora era solo mío, aunque otra chica pensara en un futuro que no.
Xxx: Te quiero Ashley, no te vuelvas a ir de mi lado
Ashley: Te amo Christian, tu tampoco te vuelvas a ir nunca...
Si, habéis leido bien, el chico del que estaba enamorada era Christian, un chico australiano que había conocido en mis vacaciones. Había echo un "intercambio" con su instituto pero desde que lo vi, sabía que en realidad lo había echo por mí. Nadie lo había visto antes, excepto yo. Era un chico muy guapo y tenía buen cuerpo, por lo que sabía que en un futuro tendría muchas competidoras, pero no iba a perder contra ellas, y menos después de todo lo que habíamos pasado. Lo cogí de la mano y bajamos del escenario, ahora necesitábamos tiempo juntos. Llegué a la entrada de la casa de mis primas, abandonando la fiesta, o dándola por terminada, como prefiráis, y eché a correr a un parque cercano, que nadie conocía, y en el que sabía que estaríamos solos, podríamos vivir lo que no habíamos vivido todo esto tiempo, daríamos rienda a nuestros sentimientos que llevábamos tanto tiempo ocultando.
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Si comentáis, maratón!! Xq hasta el 30 o x ahí no podré subir, y así se os hace menos larga la espera, eso si, si los subo, no los leáis todos de golpe, xq así os cundirá menos
OS KIERO!!!

Capitulo 10: Se acabó todo.. ¿en serio?

El que había dicho mi nombre no había sido Él... Aunque conocía perfectamente esa voz, que hacía un tiempo que no escuchaba. Dejé de posar mis ojos en el lado derecho del escenario para fijarme en el lugar del que procedía la voz de alguien muy querido por mi, que me diría algo inesperado para mi...

Xxx: Ashley, yo... Lo cierto es que no sé como empezar. Siento haber tomado yo la palabra cuando no es a mí a quién te dirigías, pero es que tenía que hacerlo. Sabía que había pasado algo en verano, para que engañarnos, ¿no? Aunque esperaba que hubiera sido algo poco importante en tu vida. Esta noche me he dado cuenta de que no, que realmente era algo muy fuerte e importante. Y lo cierto es que ya que tú te has tirado a la piscina, diciendo todo lo que sentías, lo cierto es que entonces yo también me tiraré, por una vez seré valiente como tú, por una vez daré yo el paso y lucharé por lo que quiero. Lo cierto es que llevaba mucho tiempo callándome mis sentimientos, pero ya me harté, y después de esta noche comprendí que podía perder a la persona que quiero si no me juego por ella, y lo cierto es que... Ashley, siempre me preguntabas de quién estaba enamorado, porque me veías con una sonrisa en la cara, pero nunca te diste cuenta de quién era, y yo nunca te lo decía.. Puff, esto me está costando más de lo que creía... El caso es que sí, estaba enamorado antes, y lo sigo estando, de la misma persona. Llevo enamorado de la misma persona mucho tiempo aunque ella nunca se dió cuenta, a pesar de todas las veces que me preguntó por ello, nunca pensó el motivo por el que no le contestaba, ¿verdad Ashley? Porque sí, tu eres la chica de la que llevo enamorado casi desde que tengo memoria. Estoy enamorado de ti, y no te aprecio y quiero estar contigo por lo que quiere la mayoría, no. Quiero estar contigo porque conozco como eres, como eres de verdad, una chica inteligente, dulce y hermosa por dentro, tanto o más de como lo eres por fuera, y aunque sé que no me quieres a mi, he decidido jugármela para que pueda al menos tener una oportunidad de que me quieras, porque sabía, después de ese discurso, que o lo intentaba, o jamás conseguiría nada.

Tiró el micro y salió corriendo del escenario. La verdad e3s que lo que había dicho me acababa de dejar completamente descolocada, y aunque quería gritar que no se fuera así, no pude, porque en ese mismo momento me desmayé... Habían sido demasiadas emociones por un día, y necesitaba un relax, que mi cuerpo me dio, al no hacerlo yo por mi misma.

Genial, en la misma noche me había desmayado dos veces, una por borrachera y la segunda por estrés, no podía seguir así...

Esta vez, el desmayo fue más corto, y a los 10 minutos ya había abierto los ojos, y lo encontré a mi lado.

Ashley: ¿Me quieres decir que ha sido todo eso? y por cierto, si estás aquí.. ¿Fuiste tú el que me cuidó la otra vez?

Xxx: Siento haberte puesto así, pero lo único que hice fue decir lo que tenía dentro... Y si salí tan corriendo fue porque tenía miedo de tu respuesta.

Ashley: Pero Edwin, ¿porqué no me lo dijiste antes? Y sabes que no te iba a dejar de lado por esto tan fácilmente, eres mi mejor amigo desde hace muchos años, desde que éramos pequeños, y sabes que de una forma u otra yo también te quiero muchísimo, y no por quererme de forma distinta a la que te quiero yo ibas a perder mi amistad, eso deberías saberlo, pero por ahora amo a otra persona, aunque quizá en un futuro mis sentimientos cambien, en el presente no te puedo corresponder, lo siento...

Edwin: No tienes por qué disculparte, he sido yo el que no ha debido decir nada todavía, vete con tu chico anda, que te estará esperando.

Ashley: Me iré, pero no sin antes decirte esto: no has sido nada tonto, a cualquier chica le gusta saber que alguien tiene esos sentimientos por ella ;) aunque quizá no sea yo la mujer de tu vida, tarde o temprano la encontrarás, y será merecedora de todo tu amor, estoy segura, y ¿quién te ha dicho que yo no pueda cambiar mis sentimientos? El corazón y los sentimientos de una persona pueden cambiar, y tú hoy has dado un paso importante hacia cambiar los míos, pero por desgracia aún te queda mucho por recorrer, para empezar porque mi corazón ahora tiene dueño, que me está esperando fuera. No olvides que te quiero mucho, Edwin,  aunque a veces no te lo demuestre...

Salí corriendo, esta vez fui yo quién lo dejó con la palabra en la boca, pero es que no podía evitarlo, me estaban esperando, y yo no podía hacerle esperar más, ya lo había echo esperar demasiado todo este tiempo... 

Un haz de luz salió en cuanto abrí la puerta, y lo vía a Él allí, con el micrófono en la mano, a punto de hablar, se dirigía a mi, y la verdad, era la primera vez que estaba tan nerviosa por una respuesta en toda mi vida...

Por fin podría volver a ser feliz, viviendo otra vez momentos especiales con él... 

Xxx: Bueno, creo que lo mejor es empezar con una canción, así que aquí está...

Capitulo 9: Cambios profundos...

Fui hasta donde estaba Jennette, realmente estaba muy mal y me daba pena verla así, a pesar de todo, así que decidí consolarla, aunque después me quisiera matar por ello XD.
Ashley: Hola Jennette
Jennette: Ah, eres tú Ashley, ¿qué quieres?
Ashley: Pues aunque no te lo creas,cosa comprensible porque aún no me lo creo ni yo, he venido aquí a ayudarte y a tratar de que te sientas mejor, me cuesta verte así.
Jennette: ¿ Y tú precisamente vienes a ayudarme? ¿Tú, que tienes una maravillosa fiesta de cumpleaños ahí mismo, en la que están todos tus amigos, que te quieren, y alguna gente que casi no te conoce pero que ha venido porque eres popular, tú que has estado durante 2 años saliendo con el chico más guapo del colegio, me vienes a consolar a mí? ¿No será mejor que vuelvas a tu espléndida fiesta y me dejes tranquila con mi vida, no tan perfecta?
Ashley: La verdad, no. Verás, aunque pueda parecer mentira, mi vida no es tan perfecta como tú la pintas, ni como el resto del mundo cree. Para empezar, agradezco el esfuerzo de mis primas al hacerme esta gran fiesta, pero no me sirve de nada si no disfruto de ella, cosa que ahora mismo no puedo hacer, porque no estoy bien, precisamente. Mis amigas, en realidad, no lo son tanto como parecen, por desgracia, y la popularidad no sirve de nada si la gente no te aprecia por como eres. Respecto a Andrew, que sea el chico más guapo del colegio, no quita para que yo no estuviera a gusto con él, porque de nada sirve salir con alguien si no lo quieres y él no te quiere a ti, y yo nunca lo quise, y parece ser que él a mi tampoco. En verano me enamoré de otro chico y hasta ahora no he podido estar con él y cuando le iba a decir que todos los impedimentos se habían acabado, resulta que aparece mi hermano y me jode la noche "presentándome" a su nueva novia, que era la que yo creía mi mejor amiga.
Jennette se levantó y me miró a los ojos.
Jennette: ¿Sabes? Siempre creí que tu vida era perfecta y sin embargo, me acabo de dar cuenta que muchas cosas parecen lo que no son y que en realidad, todo el mundo tiene problemas en su vida que debe resolver, y el mío tiene que ver con Andrew, hasta que no lo resuelva me seguiré sintiendo mal, y no lo puedo permitir. ¿Y tú a que esperas? Corre al escenario y dile todo lo que sientes al chico al que amas, porque puedes perderle sino te das prisa, no te va a esperar siempre aunque te lo haya prometido ¿sabes? Y si te quiere de verdad, serás muy feliz con él. Date prisa en volver, y mucha suerte, aunque no sea yo la que debería decirte esto....
Sonreí para mis adentros, tenía razón en todo, ¿quién lo hubiera dicho que pudiera ser tan sensible cuando se lo proponía?  Le di las gracias y me marché de allí lo más rápido que pude, aún tenía algo que haer en aquella fiesta antes de que acabara....
Cogí el micro y esta vez sin dejar que nadie me lo arrebatara para hablar como antes había echo mi hermano, comencé.
Ashley: Veréis, hace un rato quería decir algo, pero se me adelantaron y no pude hablar. Bueno, ahora tengo mi oportunidad, y no la pienso desaprovechar. ¿Sabéis? Este verano fue el mejor de mi vida, y no, no es por lo que todos estáis pensando, que me he ido de vacaciones por un montón de sitios al que la mayoría quisieran ir. No, no tiene nada que ver con eso, sino con algo mucho más importante en la vida: con el amor. Después del mes de julio, llegué a la que era mi antigua casa, en la playa de Murcia. Allí lo vi, nada más volver. Estuvimos hablando varios días, y la verdad es que empecé a sentir algo muy fuerte, que no había sentido antes. A mitad de mes, me di cuenta que me había enamorado. Por suerte, él, aunque yo no me lo esperaba, me correspondía, pero al empezar las clases, tuvimos que dejarlo, por lo que todos sabéis. Bueno, todo esto ¿para qué? os estaréis preguntando. Pues bien, porque me he librado del único obstáculo que había en esta relación: hoy he dejado a Andrew, y quiero estar contigo, no me importa lo que digan los demás, ni tampoco lo que piensen, solo quiero estar junto a ti y no separarme nunca, si tú me dejas...
De repente, vi a alguien corriendo entre la gente, entre aquel mar de personas que se había formado debido a mi discurso. Era Él, sin duda. Nunca me equivocaría en esto porque además, él era diferente e inconfundible. Mi corazón se aceleró al verlo, y mis pulsaciones iban a mil por hora. Sin que nadie me lo dijera, sin que hubiera llegado al escenario siquiera, sabía que a Él le pasaba lo mismo, y no necesitaba más muestra que esa para comprender cuanto lo quería, y lo fuerte que era nuestro amor. Por fin llegó al escenario y cogió el micro para decirme lo que él sentía... Cuando llegó le dijo algo al chico que se encargaba de la música, y comenzó a sonar una canción que yo conocía muy bien...

Xxx: Ashley, yo...
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Espero que os haya gustado, como habeís visto, la cosa se ha puesto interesante jajaja
Bueno, comentadme XD
Hasta el viernes no creo que suba, pero lo intentaré

Capitulo 8: Misterios resueltos...

Narrado por Max:
(10 minutos antes de la llegada a la fiesta...)
Vendría. Ella vendría y se daría a conocer delante de mi hermana, por fin sabría toda la verdad, y yo me libraría del peso que suponía ocultarle algo a mi enana, a mi princesita desde que nació... y más si tenía algo que ver con el secreto de la que en este momento era una persona tan importante para mi...
Quería llegar tarde a la fiesta, porque en cuanto llegara se iba a saber todo, y si no era de su agrado, le podría fastidiar toda la velada a mi hermana, y no quería. Al cabo de un tiempo corto, miré el reloj, y decidí que iba siendo hora de marchar, así que cogí las llaves, bajé al garaje y me monté en el coche. Ella ya estaría allí con toda seguridad, así que no haría falta que pasara a recogerla, como siempre hacía.
No sabía lo que me esperaba todavía en aquella fiesta, de la noche del cumpleaños de mi hermana, ni lo que supondría después en las vidas de muchos de los asistentes en sus vidas...
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Narrado por Jennette:
Aunque ellos no se habían dado cuenta, yo estaba detrás de la pared escuchando toda la conversación que ellos estaban teniendo. Quería que se acabara aquella relación, porque llevaba mucho tiempo enamorada de Andrew, y Ashley era el único obstáculo que me quedaba por saltar para llegar a la meta. O eso creía...
Por lo que pude oír, realmente no sentían nada fuerte el uno por el otro y es más, estaban los 2 enamorados de otras personas, y por lo que parecía, la chica especial de Andrew, aquella que le había robado el corazón, no era yo.
Lloré hasta que no me salieron más lágrimas aquella noche... Era tan doloroso pensar y saber que la persona que te quitaba el sueño por las noches, aquella que tanto admirabas, en realidad, no sentía lo mismo por ti, y tu solo habías sido un juego para él, al que sin querer realmente te habías lanzado tú... ¿Cómo pude ser tan estúpida?
Lo había querido tanto y ahora todo ese amor estaba desparramado por los suelos, parecía que mi mundo se había acabado, y todo por su culpa, por no quererme...
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No me pude creer lo que vi al abrirse aquella puerta. Enseguida supe que no era la novia de mi hermano, pero era algo que nunca había esperado ver en esta vida: Jennette salía de la casa escopetada, llorando como nunca lo habría echo ni nunca más lo haría, y todo por Andrew, mi ex. En el fondo, ahora entendía un poco mejor todos aquellos años que me había estado torturando, no era por maldad, no era por querer fastidiar a una persona porque sí... Eran sobre todo, celos, ya que la que había estado con Andrew estos 2 últimos años había sido yo, y no ella... Jamás pensé que le gustara de esa manera, nunca me di cuenta. Y aunque sé que me arrepentiría después, ahora tenía que ayudarla, pues estaba sufriendo muchísimo por alguien tan idiota que no apreció todos esos sentimientos. Y aunque intenté salir detrás de ella, mi hermano me lo impidió, porque no podía perderme el conocer la identidad de la chica de sus sueños durante estos meses...
No sé que fue peor: El ver quién era ella, o la cara que puse cuando me di cuenta de lo tonta que había sido al no darme cuenta, y del asombro que me causó... Estaba vestida comon una auténtica estrella, y realmente lo parecía. Quería destacar, estaba claro, y no encontró mejor ocasión que esta para hacerlo, eso si, a costa de quitarme a mi el protagonismo
Avanzó hasta el escenario, e intentó hablar conmigo:
Xxx: Escucha, sé que esta situación no te hace gracia, pero yo...
Ashley: Jenny, no me lo puedo creer , ¿Cómo has sido capaz de hacerme esto? Yo lo sospeché, pero nunca esperé que fuera cierto de verdad, a pesar de que aquel día te vi salir de mi casa, esperaba que no fuera por esto,  pero está claro que si, ahora que también demuestras como eres, y pensar que has sido mi mejor amiga durante todos estos años... sabía por tu actitud muchas cosas, pero que llegaras a tanto, la verdad que... jamás. Y para que te quede claro, nuestra amistad se ha terminado aquí, AHORA Y PARA SIEMPRE, ¿me has oído?
Jenny: Escucha, de verdad, necesito que lo hagas, por favor, Ashley...
Ashley: No pienso escucharte ya he visto lo que necesitaba y yo no tengo nada más que hablar contigo, se acabó.
Me giré y me marché de aquél escenario tan rápido como pude, y fui a buscar a Jennette, aunque parezca mentira. Sin embargo, me fijé en la cara de mi hermano al bajar, parecía muy deprimido... ¿sería porque me había peleado con su novia? No creo, él nunca se puso así por nadie ¿no?
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Espero que os haya gustado, al final subí el kapi, como prometí XD
Bueno comentad, y agregadme a mi nuevo tuenti, que puede q suba la novela alli
Os kiero mis lectores/as